tolstoi Publicado 29 de Enero del 2023 Publicado 29 de Enero del 2023 (Es necesario que leer primero la parte 1 para tener un mejor contexto de la historia) Después de mi pequeño encuentro en año nuevo, todo volvió a la normalidad, éramos los mismos de siempre, yo poniéndome de su lado contra Walter, pero siempre acompañado de una sonrisa discreta cómplice en la cara de los dos. Estábamos en verano, por lo que aprovechamos en ir a la playa, una salida de parejas de amigos y unos más que también se unieron al grupo, la oportunidad de ver a mis niñas que como estaban de grandes, Jimena llevaba puesto un traje de baño, un bikini color turquesa que le quedaba de maravilla, los dos nudos que tenia en las caderas, y la parte de arriba que sostenía su preciado tesoro. Cuando la miraba, recuerdos venían a mi mente de como había acariciado ese cuerpo, me quedaba nublado y perplejo solo mirándola. Nuestra visita a la playa fue una de las que más recuerdo hasta ahora, mi enamorada y Jimena habían congeniado y conversaban mucho, se divertían sentadas bajo la sombrilla, cada una con su sombrero y sus lentes de sol. Me acercaba a ellas y no podía disimular mi mirada clavada en sus pechos, pero como también tenía puesto unos lentes de sol, no se daban cuenta, pero para no quedarme prendido de los hermosos senos de Jimena cuya curvatura perfecta emanaban sobre la tela y marcaban sus pezones me había propuesto irme a la orilla a ver las olas. Estaba parado en la orilla, y con mi pie marcaba mis huellas en la arena mientras las pequeñas olas las borraban. Sentí de pronto que una mano tocaba mi hombro, era Jimena que se había levantado de su silla para venir a remojarse porque su tonto enamorado que era el bromista del grupo, había derramado un poco de cerveza en su pie. Entras me dijo, y yo la vi correr al mar y me fui tras ella, entramos solo hasta que nos cubriera el agua la cintura, ella se remojo un poco con las manos y luego salimos, vamos me dijo ya han pedido comida y se la van a acabar toda, rápido, y nos dimos prima por salir, yo la seguía con la mirada y me puse a su lado, de pronto no se de donde salieron un par de niñas corrían jugando persiguiendo una a la hora y casi se atravesaron por nuestro camino, que nos dimos una vuelta completa, para evitar chocarnos, una niña pasa bien cerca de la cintura de Jimena y hace que el nudo de la parte de debajo de su ropa de baño se desate y veo como empieza a soltarse y empieza a caer, de pronto me le pego jalándola hacia mí, cara a cara, ya se le empezaba a caer y logre evitarlo, a todo esto ella estaba roja de la vergüenza pero por suerte nadie más que yo tenía la privilegiada vista de la que nunca podré olvidar. Jimena cogió los extremos y se acomodó bien e hizo nuevamente el nudo, le dije a mi no me molesta, riéndome, ella me dijo, gracias por estar aquí. Y regresamos al grupo que ni cuenta se dio de nuestra ausencia, ni de la escena que metros cerca de la orilla había ocurrido. Solo una sonrisa cómplice en un lenguaje tan nuestro quedaba para el recuerdo de los dos. De regreso al departamento, que era como mi casa, mi enamorada ya se había ido a su casa, unos pocos estaban en la sala, Walter ayudaba a Jimena a bañarse, yo me fui a bañar al otro baño, tocaron la puerta, estaban buscando a Walter para jugar pelota, todos se fueron a jugar pelota junto con Walter, les dije que como yo me estaba bañando me quedaría, salgo del baño y no había nadie, estaba en toalla así que me fui rápido al cuarto a cambiarme, me voy al cuarto de Walter a buscar desodorante, abro la puerta y me encuentro a Jimena con calzoncito tanga negro, sin brazier, con ese par de hermosos senos y con unos pezones como par de timbres, me acerque lentamente, me miro, la mire y me acerque más, cuando estuve delante de ella, la mire y le dije, ahora yo te doy gracias por estar aquí. Frote suavemente uno de sus pezones un dedo, y le dije, como me hubiera gustado ser yo el que te jabonaba la espalda, y con la otra mano le acariciaba el hombro, bajando mi mano por su espalda hasta acabar cogiéndola por la cintura y pegándola hacia mí, quedando frente a frente, este secreto se va a actualizar le dije, y la comencé a besar, y tanto ella como yo sentíamos esa adrenalina de lo prohibido al estar nuevamente solos besándonos, abrazándonos, tocándonos, nos tumbamos en la cama y comencé a lamer y chupar sus pezones, que rico, no había sentido tanto placer besando y acariciando, un cronometro en mi cabeza, no sabía cuánto tiempo tenia, pero ella lo dijo primero, que podían llegar, debíamos parar, tenía ya buen rato ahí prendido de sus tetas, por lo que tuve que despedirme de ellas, les hablaba como si fueran personas reales, pedirle que se cuidaran mucho que papi las quiere, las extraño mucho, una despedida tan larga. Pero al final, hicimos una promesa, que íbamos a terminar nuestro encuentro en otro momento, nos dimos el meñique y por nuestro secreto, hicimos nuestra promesa.
tholomeo1785 Publicado 23 de Febrero del 2023 Publicado 23 de Febrero del 2023 hace 5 horas, tolstoi dijo: pronto la parte 3 Esperando la 3era parte campeon.
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