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Una historia de palosecos


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Parte 1: Alexia

 

Esto sucedió en los primeros años que empecé a frecuentar el distrito felino, aún no tenía alguna casera de confianza y mi propósito principal era follar la mayor variedad de culos posibles sin importar raza o nacionalidad, si era joven o madura, si era cuerpona o paloseco.

Y es precisamente con una paloseco con quien empiezo este relato, aunque no es precisamente la protagonista de toda la historia, pero sería clave para que todo lo demás se diera. Me contacté con una chica, peruana, que anunciaba como Alexia, hacía salidas a hoteles de Lince, en sus fotos se notaba su contextura delgada y por su regular talla daba la impresión de que era más huesuda de lo normal. No había cachado con una mujer así en mucho tiempo por lo que ese fue el principal motivo de mi elección. Publiqué su atención en el foro en ese entonces, pero en lugar de poner el enlace les voy a relatar el encuentro con ella. 

Las cosas no empezaron bien ya que la flaca no soportaba el sabor del condón y ponía unas caras que la delataban, aunque personalmente no lo tomé tan mal ni mucho menos me desmotivó ya que lo que fantaseaba más que nada era penetrarla y sentir que su coño me de un buen ajuste. Para no hacerla sufrir y evitar que incluso pueda vomitar, le dije al poco rato para empezar el polvo, le pedí que se ponga encima (cowgirl) mirándome, a ver si le hacía rebotar ese par de tetas, que a lo mucho eran medianas pero era lo que más resaltaba en ella, y para mí beneplácito su ajuste era lo que me esperaba para una chica de su contextura.

Yo estaba en la gloria, pero en menos de dos minutos me dijo que estaba sufriendo en esa pose y quería que la cache en misionero porque en esa pose le gusta más y no la sufre tanto, le acepté sin pleitos para ganarme su confianza y porque esa era una de mis poses favoritas en mis primeros años de putero, lo malo es que al tenerla cerca sus gemidos los escuchaba más de cerca y poco a poco me fueron quemando el cerebro hasta que liberé la primera ración lactosa. Pero yo pagué por 1 hora y en el segundo polvo no se le iba a aceptar full misionero, así que desde la conversación en el entretiempo le dije que también me gustaría hacerlo poniéndola en cuatro, y para que vea que no quería ser malo con ella le dije que si empezábamos con esa pose lo iba a hacer suave y luego cambiamos a misionero para terminar con algo más de contundencia, ya que sería peor empezar en misionero y terminar en doggy porque ahí sí sufriría con mis embestidas, a lo que Alexia aceptó y empezamos en la pose canina; empecé suavecito, poniendo solo la cabeza, cuando le empecé a poner más intensidad y traté de meterle la guasa más adentro nuevamente empezó con sus gemidos arrechantes, Yo me seguía concentrando para no caer tan rápido y cuando le quería meter todo el sinhueso la flaca se quería safar, pero como la estaba tomando de las caderas no la dejé. Para cumplir mi palabra cambiamos a misionero sabiendo que ya iba a acabar al poco rato. En resumen Alexia no fue un polvazo, pero lo hubiera sido con algo más de aguante y maña para no asquearse saboreando el condón, su ajuste fue uno de los mejores que sentí y por eso hasta ahora lo recuerdo, en general siento que me fue bien aquella vez, salí bien deslechado a pesar de lo quisquillosa que era.

A la semana de ese encuentro Alexia me escribe (o quizás su mami o caficho, nunca lo sabré), pero le respondí tarde y no continuamos la conversación. Luego de otra semana me vuelve a escribir, y al responderle me comenta que tiene otra amiga "modelo" de similares características que ella (también peruana), que cobraba algo más pero que era muy guapa y caleta, y luego el clásico floro de que recién le entraba a la nota y que otro pata la había probado y le fue bien, hasta me mandó una foto. Le dije que si me podría animar pero que le iba a confirmar cuando estaría libre para coordinar la cita. Al día siguiente me insistió y me dijo que la chica andaba en apuros y solo podría salir esa semana, yo no cedi a su presión y le dije que no podía hasta la semana entrante, así que finalmente me dijo que le iba a contar su amiga a ver si podía darse un tiempo en esa semana. Y esa vez fue la última vez que me escribió, ya que al poco tiempo le perdí el rastro y no tengo idea si seguirá atendiendo.

La semana siguiente recibo un mensaje de un número desconocido, diciendo llamarse Valeria, la amiga de Alexia de quién ella (o su mami/caficho) me había comentado. Para no extender más el relato haré una segunda parte.

 

  • 2 weeks later...
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A pedido del público :V, ahi les va la continuación:

 

Parte 2: Valeria

En la primera parte narré cómo fue mi cita con una paloseco que llamaré Alexia y cómo ella (o quien usaba su número) me recomendó a una supuesta amiga caleta a quien llamaré Valeria, la cual finalmente me escribió pocos días después.

Valeria me dijo que su amiga le había dado mi número en caso se animaba a citarse conmigo, cosa que concordaba con lo que había conversado con Alexia, ya que inicialmente querían la cita lo más rápido posible y yo no tenía tiempo hasta la siguiente semana, justo cuando Valeria me escribió. Entonces me pregunta si sigo interesado en conocerla, le dije que si y coordinamos la fecha, hora y lugar.

Decidimos vernos en un telo de Miraflores, por la vía expresa, una zona tranquila incluso en las noches. Yo llegué obviamente más temprano para separar cuarto, indicarle el número de habitación, darme un duchazo y esperarla viendo tele. Si bien sabía que no era una verdadera caleta tenía la esperanza de que sí se estuviera iniciando en el puterío, tenga la papá poco trajinda y con eso justificar el precio que me estaba cobrando.

Valeria llegó a la hora pactada, era de la misma talla de Alexia (la talla promedio de las mujeres peruanas) pero no era tan delgada, su rostro tampoco era más agraciado que el de Alexia, pero aún así su sonrisa tímida me provocó. Le pregunto algunas cosas como para romper el hielo, le doy el pago para que entre en confianza y aún así la escuchaba nerviosa, le dije, entre otras cosas, que se relaje y que no se preocupe porque la iba a tratar como si fuera mi enamorada, que iba a empezar suave y según se den las cosas íbamos a aumentar la intensidad. La abracé por la cintura y empecé dándole un beso en los labios, nos quedamos así varios segundos mientras yo pasaba mi mano por su espalda y luego por su culito. Nos empezamos a desnudar poco a poco y aún la seguía notando nerviosa, para ya no perder más tiempo la seguía desnudando en lo que la seguía besando y cuando le bajé la ropa interior estaba peladita y casi cerrada por fuera, yo ya me estaba empezando a enfermar, ya quería romperle el coño a esa palo seco, pero tampoco la quería traumar en la primera cita, así que fui bajando poco a poco desde su boca, pasando por sus tetitas (super chiquitas por cierto, tanto que parecían de niña) hasta llegar a su concha y le empecé a hacer la sopa por varios minutos, noté que le gustaba y que se humedecía cada vez más. Así que cambiamos de lugar y le dije que me la chupe, ella empezó despacio y sin abrir mucho la boca, por rato le sentia los dientes pero andaba tan arrecho que ni se lo dije, además que yo ya estaba al palo y solo le pedí el oral para ver cómo se atoraba.

Para no hacerla sufrir más le dije para empezar el polvo, lo hicimos en misionero para que esté cómoda y para ver su cara mientras la penetraba, pero lo haría solo un rato para no quemarme el cerebro en caso se ponga a gemir mucho como su amiga Alexia. Y la verdad me excitó mucho ver su cara de sufrimiento, la manera como agarraba las sábanas e incluso en una instante casi me clava las uñas, todo eso sumado al buen ajuste de su concha, bastante similar al de su colega, así que cambiamos a piernas al hombro y luego a cowgirl, le dejé moverse pero lo hacía suave, para no alargarla más la empecé a bombear desde abajo hasta liberar la chele mientras ella gemía en mi oído. Ya había pasado poco menos de media hora desde que Valeria llegó a la habitación. Luego la noté algo más suelta y calmada, ya había entrado en confianza después de haber cumplido mi promesa de que se lo iba a hacer suave. Para el segundo polvo ya no me contuve tanto y terminé dándole en la pose de Bobby, por su contextura tampoco tenía mucho culo, pero en 4 siempre se forma algo interesante y ver mi verga entrando y saliendo de ese culito también me resultaba muy arrechante. Recuerdo que al final de todo incluso entramos juntos a la ducha ya que era bastante amplia y de pasada le seguía metiendo mano a ver si aflojaba un polvo por amor al arte pero no funcionó xD.

En resumen, la atención fue buena y era digna de repetir de cuando en cuando, así fue que empecé a frecuentar a Valeria. Ella ya estaba más desinhibida y cada vez entrábamos más en confianza, ya no era necesario empezar tan suave como en nuestro primer encuentro y empezamos a probar otras poses e incluso en ocasiones me ganaba la arrechura y le insinuaba para metersela a peluchón, cosa que era una de mis fantasias más extremas para hacer con una paloseco, pero ella aún no se animaba con la excusa de que nunca lo había hecho pelado y por ende no se cuidaba.

Pero con el pasar de los meses habían ciertos aspectos que no me gustaban del todo por parte de ella, el detalle de estos problemas y la manera en cómo afronté esa situación lo narraré en una tercera y última parte.

  • 2 weeks later...
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Porque el pueblo lo pidió 🤣, acá va la parte final:

 

Parte 3: el polvo definitivo

Breve resumen de las 2 primeras partes: contacté a una paloseco (Alexia) que luego hizo que su amiga "caleta" (Valeria) se contactara conmigo y como su atención me gustó a pesar de ser algo más cara, la empecé a frecuentar, fuimos agarrando cada vez más confianza, pero al mismo tiempo habían detalles que no me agradaban.

 

Para empezar, fue bastante quisquillosa con la elección del hotel a dónde íbamos, su excusa era que tenía familiares taxistas y no quería que alguno de ellos la viera ingresando a un hotel; así que elegimos uno cuya puerta de entrada se confunde con la puerta de otro negocio que hay en el primer piso del edificio; no era algo por lo cual hubiera decidido dejar de verla, solo que lo sentía en el bolsillo. Lo que me desagradó, pero nunca le dije, era que había agarrado la maña de preguntar cuándo nos volveríamos a ver, aunque no era tan directa: empezaba el chat con otro tema y luego me preguntaba cuándo me desocupaba, el hecho es que ya sabía cuál era su intención cada vez que me escribía. La gota que derramó el vaso pasó en el último mes que la cité: la calidad de los polvos bajó porque ella se quejaba de resequedad, por más que usaba lubricante tenía la concha irritada y a duras penas acababa los dos polvos, por lo que yo ya no disfrutaba de nuestros encuentros tanto como en las primeras citas; llegó al punto que ella solo aguantó un polvo y no pudo más, el segundo "polvo" fue una mamada y un pajazo.

Lo único rescatable de ella era su ajuste y mi esperanza de que volviera a su performance de antes. Por lo tanto decidí citarla una vez más y en base a si cumplía o no con lo que quería hacer continuaría buscándola o nos alejaríamos definitivamente.

Por cosas del destino nos vimos en un hotel distinto al habitual, pero casi igual de caleta en la entrada. Empezamos con los chapes previos y la metida de mano por todo su cuerpo, algo clásico de nuestros encuentros, nos terminamos de desnudar y le pedí que me la chupe en 69 para también pasarle lengua y dedos por su almeja y asegurarme que se moje lo más que pueda, me quedé lamiéndole la concha por varios minutos hasta tenerla bien caliente en lo que ella también se atoraba con mi verga. Empezamos a cachar en misionero y piernas al hombro, cómo en nuestra primera cita, pero solo por unos instantes para no acabar tan rápido por sus gemidos; le pedí ponernos de pie para cachar parados por todo el cuarto: primero contra la pared, luego ella apoyada en una mesa como pollito tomando agua y yo atrás bombeando, la estábamos pasando bastante bien y no se estaba quejando por sus problemas de resequedad. Pero en mi mente me decía a mi mismo que esto no era suficiente para seguir frecuentandola y soportando su insistencia por el chat, yo quería más, mi pinga quería más, nuevamente me entraron las ganas de cogerla al natural.

La cargué hacia la cama, la recosté boca abajo y me quité el poncho de pura calentura, le empiezo a sobar la papa con mi pinga pelada para que se de cuenta de mis intenciones, pero a diferencia de las otras veces en que le propuse hacerlo al natural, ella no me dijo nada y dejó que continúe, así que le metí un pollo a mi polla (xD) y le metí cabeza. Ella se sobresaltó pero luego se quedó quieta mientras la seguía penetrando lentamente. Yo mientras lo hacía suave trataba de concentrarme para no venirme rápido, no había experimentado esa sensación desde hacía algunos años y en ese momento me sentía en las nubes, lo malo fue que ella empezó a quejarse por la falta de lubricación y me dijo que le estaba empezando a doler. Le dije que resista un poco más que ya estaba por terminar, cuando en realidad yo estaba haciendo todo lo posible por no terminar, sus gemidos ya me estaban quemando el cerebro y noté que se me quería escapar, le dije nuevamente que aguante y como yo estaba encima de ella la tomé de los hombros y le metí todas las revoluciones, que rico cache csm hasta ahora lo tengo guardado en mi mente y se me sigue saliendo una gota.

Ya con toda la potencia de bombeo estaba a punto de disparar y la verdad la arrechura del momento me nubló la mente y ni siquiera pensé en sacar la verga para terminar afuera, así que me quedé eyaculando dentro de ella y esa sensación sin duda alguna fue la mejor de toda la sesión. Mientras seguía eyaculando sin sacarla, sentía como el semen que ya había disparado se escurría difícilmente entre mi verga y la chucha de Valeria cayendo poco a poco sobre la cama. La calentura era tal que ya tenía ganas de bombearla nuevamente, pero recordé que Valeria ya estaba sufriendo un buen rato así que le saqué la verga aprovechando al mismo tiempo en poder ver su vagina con mi semen chorreando, algo que me genera mucho morbo y no presenciaba desde hacía algunos años.

Ella se fue rápidamente hacia la ducha para darse un lavado de chucha y sacarse toda la chele, se quedó varios minutos en los que me empezó a reclamar de que tenía demasiado semen adentro jajajajaja. Yo también había entrado para refrescarme y lavarme la pieza en lo que intentaba calmarla y decirle que todo eso era normal y que confíe en la píldora. Regresamos a la cama a secarnos pero ella aún seguía con cara de preocupación. Yo me acerqué para tratar de relajarla y decirle para empezar otra vez, pero ella mira su celular y me dice que ya había pasado más de 40 minutos, cosa que era cierto pero no perdía nada con intentar alargar la cita xD. Luego ella añadió que últimamente estaba pensando en dejar de hacer salidas, con eso último pude confirmar que ella había entendido claramente mis intenciones, que si nos seguíamos citando lo mínimo que le iba a pedir era cachar a pelo, y por su reacción también entendí que no estaba dispuesta a tanto. Así que nos vestimos y por algún motivo que no recuerdo salimos juntos del telo.

Nos despedimos, no sin antes haberle dicho que si cambiaba de opinión (con respecto a las citas) me lo hiciera saber. Esa fue la última vez que nos comunicamos, ya que me dejó de escribir como por arte de magia y pues creo que yo nunca había iniciado una conversación con ella. Mi plan del polvo definitivo había funcionado mejor de lo que pensé: inicialmente planifiqué que si no hacíamos las citas a mi modo la dejaba de citar, pero en cambio ella fue la que decidió hacerlo. Pasaron varios meses y me animé a escribirle, pero el mensaje nunca le llegó, supongo que me habría bloqueado o cambió de número. Prácticamente la había olvidado hasta que por cosas de las redes sociales encontré uno de sus perfiles, pero no me he animado a escribirle ya que actualmente ya conozco chicas con las que la paso mejor pagando menos. Finalmente, hace poco más de un año en un chat alguien puso una foto de ella de medio cuerpo desnuda, sin descripción ni contexto alguno, al parecer montandose una verga por cómo tiene la cara jajaja, le escribí por interno al pata para sacarle el dato pero se hizo el loco y solo me dijo que era una kine, al poco tiempo se desactivó su cuenta. Y eso fue todo señores, por el momento es el final de esta historia.

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